Conflicto estudiantil :Etéreas soluciones en Educación

Conflicto estudiantil :Etéreas soluciones en Educación

18 Julio 2011

La incorporación  de los padres y apoderados  al proceso educativo  significa modificar estructuras que por décadas han sustentado al sistema pedagógico chileno por lo cual es una labor ardua que merece especial atención especialmente en estos momentos.

Hugo Pérez White >
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Los padres de los alumnos que ingresan al sistema educacional chileno, habitualmente no demuestran mayores compromisos con las escuelas donde asisten sus hijos, salvo, cumplir con la necesidad  de matricularlos en los períodos que la ley establece para estos efectos y esa actitud pasiva deteriora la comunicación eficiente que debe  existir entre profesores, alumnos y apoderados.

Los padres son los directamente interesados en conseguir una educación de calidad para sus hijos y si ellos no ejercen una acción activa,  directa y comprometida con el proceso pedagógico o  se desligan de participar de decisiones que van a modificar los hábitos, conductas, destrezas o valores   y no se preocupan de darles  el apoyo que necesitan sus hijos en el hogar, como complemento de lo que la escuela hace, ésta no puede por si sola lograr el pleno desarrollo de estos procesos educativos, que parecieran ser rutinarios para muchas personas y en la práctica  no lo son.

La incorporación  de los padres y apoderados  al proceso educativo  significa modificar estructuras que por décadas han sustentado al sistema pedagógico chileno por lo cual es una labor ardua que merece especial atención especialmente en estos momentos en que la atención nacional está concentrada en la educación.

El debate político, social y económico está centrado en mejorar la calidad de la educación y evaluar periódicamente los logros alcanzados en educación básica a través de diversas formas de evaluación y verificación de los resultados obtenidos, y constatar si las normas que se implementan a través del ministerio de educación en las mallas curriculares de los colegios que imparten la enseñanza a los alumnos se cumplen y han dado resultados positivos en el tiempo.-
El incentivo a los egresados de enseñanza media para postular a las escuelas de pedagogía que imparten algunas universidades pareciera ser una buena iniciativa gubernamental y los resultados académicos sólo se podrán constatar en el mediano plazo período en que  recién se empezarán a ver los resultados pedagógicos.

El éxito de estas medidas  deberán incidir  en el mejoramiento de las plantas docentes futuras que serán las que impartirán la enseñanza en las escuelas.

Esta filosofía educacional se fundamenta en preparar a los niños a enfrentar las demandas que el progreso tecnológico exige y si no están preparados para ello, verán frustradas sus esperanzas y en consecuencia arrastrarán de por vida su amargura y desconcierto.-
Es bueno que la comunidad opine, aporte ideas, ofrezca soluciones, se comprometan con su escuela, pero ello debe ser un proceso permanente y no circunstancial.

Los padres deben jugar un rol más funcional en la administración interna de los colegios donde han decidido educar a sus hijos, ser partícipes de su desarrollo cognitivo y velar que sus hijos tengan cada día una mejor educación y ella va por alternativas que deben evaluarse con criterios pedagógicos sustentables en el tiempo y no con emocionadas palabras o manifestando actitudes hostiles que más que lograr soluciones, dificultan los procesos o ejercer la violencia física o verbal que algunos padres manifiestan   hacia los profesores de aula, actitudes que no permiten una sana convivencia ni logran solucionar los problemas que puedan suscitarse en el colegio y se concluye  que siendo la educación de nuestros hijos un proceso en continuo desarrollo es responsabilidad de los padres, los propios alumnos, los profesores,  las autoridades comunales y de gobierno, los responsables en la entrega de una mejor calidad de educación a las futuras generaciones.