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El juego es un pasatiempo que nunca pasa de moda. Emocionante y glamouroso a partes iguales, atrae la atención de miles de chilenos cada año. Durante 2020 y principios de 2021, el sector atravesó uno de sus peores momentos debido a la pandemia del COVID.

Primero, tuvo que enfrentarse a un cierre total de los establecimientos. Y después, a fuertes restricciones en las aperturas: horarios limitados, reducción de aforos, limitación en la oferta de servicios...

Después de varios meses muy malos en el plano económico, la reapertura en 2021 [6] trajo datos esperanzadores. Desde que se autorizó a los casinos a abrir sus puertas en junio, el sector ha mostrado signos de recuperación. Hasta tal punto que se han batido records de recaudación pre-pandemia.

Por ejemplo, durante el mes de octubre, se recaudaron más de 16 millones de pesos chilenos en concepto de impuestos sobre el juego. Cifra que supuso un máximo histórico.

Los datos del sector online son una incógnita

Por el momento, el sector del juego online está sin regular en Chile. Esto provoca que no haya ningún registro oficial sobre el número de jugadores activos o las cantidades recaudadas por cada operador. Aunque si se tienen en cuenta algunas claves, es posible hacerse una idea de su volumen respecto al sector tradicional.

Por un lado, hay que tener en cuenta que los adultos de hasta 40 – 45 años han crecido muy vinculados al mundo de los videojuegos e Internet. Y es más probable que jueguen en un casino online a que lo hagan en uno físico.

Además, el Gobierno estima que hay unas 600 webs de juego extranjeras operando en Chile en la actualidad. En este enlace se pueden encontrar los casinos mejor valorados [7] del momento. Con una demanda tan alta y tal cantidad de casinos activos, el Gobierno calcula que la recaudación conjunta del sector en línea es muy superior a la del tradicional.

Por eso, el Congreso está dando los pasos finales para regular el sector. Así, se podrá saber a ciencia cierta cuáles son las cantidades que mueve. Y también se podrá recaudar impuestos sobre su actividad para contribuir a los gastos del Estado.

Cambios en el modelo de negocio y en el perfil de jugador

Poco a poco se está viviendo un cambio en el sector del juego. Mientras que inicialmente, toda su actividad se realizaba de manera presencial, desde la llegada de Internet [8] a los hogares, el juego en línea ha ido ganando peso.

A principios de los 2000 era algo anecdótico. Pero ha ido creciendo hasta igualar e incluso superar al juego tradicional. Uno de los motivos es el cambio en el perfil de cliente que busca este tipo de pasatiempo. Antes era una persona de mediana edad que quería mostrar su estatus y socializar. Hoy en día es un ciudadano más joven que quiere divertirse con alguna actividad que se realice online y a través de un dispositivo móvil.

Según lo visto durante los últimos años, se puede prever que esta tendencia va a continuar. El mercado online seguirá creciendo, mientras que el tradicional se mantendrá o se contraerá ligeramente.