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Un preocupante balance con 105.161 kilos de algas pardas incautadas en los dos meses que duró la veda extractiva de huiros negro y flotador dio a conocer el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura Región de Atacama.

Durante este período el equipo, incluso, desbarató una planta picadora de algas clandestina que operaba en la provincia de Chañaral.

El director regional de Sernapesca, Guillermo Mery, agradeció la participación de la ciudadanía mediante la campaña “Este verano paremos el barreteo” y las distintas denuncias que ayudaron a detectar ilegalidades.

No obstante, la autoridad lamentó las cifras de incautación, pues evidencian la falta de conciencia y visión de quienes operan ilegalmente este frágil recurso que es fuente importante de trabajo para más de 1500 familias en la región.

Tras los operativos realizados por el servicio junto a la Autoridad Marítima y Carabineros,  Sernapesca cursó en la región 29 citaciones a tribunales por infracción a la Ley de Pesca y las incautaciones fueron avaluadas en poco más de 26 millones de pesos, entre ellas las mayores estuvieron en el sector Quebrada Las Ánimas y El Caleuche, en la provincia de Chañaral.

La veda se extendió durante enero y febrero prohibiendo la extracción de algas por barreteo (uso de barreta o chuzo para arrancar planta de raíz) en toda la costa de Atacama con el fin de proteger esta especie y otros organismos que subsisten de este recurso, como peces, crustáceos  y moluscos.

A partir de este mes de marzo, se retoma la  actividad pesquera sobre este recurso que opera bajo sistema de cuotas asignadas hasta junio, cuando se establecerá un nuevo período de veda.

En este sentido, la autoridad regional llamó a los recolectores a trabajar de manera responsable y consciente, respetando las cuotas asignadas para la explotación de este frágil recurso natural.