Era la madrugada del viernes pasado, cuando dos jóvenes se devolvían de haber bebido unos tragos en el barrio Bellavista. Al pasar dos funcionarios de Carabineros, los muchachos consideraron que sería buena idea cantar “orden y patria es nuestro lema”, situación que terminó siendo todo lo contrario.

Cuando los policías, un hombre y una mujer, escucharon el canto de los muchachos, que tenían la voz un poco influenciada por la bebida, la carabinera decidió hacerles un control de identidad.

Uno de los muchachos, sin ánimo de polemizar, entregó su carnet. El otro joven prefirió negarse, ya que consideró que no había ningún motivo para ser objeto de ese procedimiento, ahí la carabinera perdió la paciencia.

La funcionaria comenzó a mostrarse muy prepotente ante el joven que escondía su cédula, mientras que él, casi como gracia, se mantenía tranquilo, pero sin ningún ánimo de mostrarle el documento que exigía la policía. El otro carabinero se limitaba a observar. 

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Muy sobrepasada por la situación, la efectivo policial no lograba que el joven le entregara la cédula, situación que la llevó a perder el control y zamarrearlo, hecho que quedó registrado en el video de un testigo. 

Una mujer que acompañaba a los civiles, le pedía cooperación al hombre, situación que después de unos minutos dio frutos ya que, luego de todo el problema, mostró su cédula.

La situación podría sólo ser un error de la funcionaria o alguna copa de más de parte de los muchachos, pero reabre el debate sobre la ley que se tramita con respecto al control de identidad.

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Según el decano de la facultad de derecho de la U. Central, Emilio Oñate, comentó a Chilevisión, no le parece la ley que se discute y añadió: “Bajo qué criterio, Carabineros, va a decir que una persona tiene el indicio de haber participado en un delito, nos parece que es discriminatorio”.