Seguridad y Estado

16 Marzo 2011

Los expertos en seguridad pública han identificado con frecuencia los problemas. Sin menoscabo de la importancia de enfrentar las causas que provocan los delitos, en su combate lo importante es implementar estrategias integrales y no medidas aisladas y mediáticas contra los delitos.

Verónica Zamorano >
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Cuando enfrentamos el tema de la delincuencia y de los crecientes índices de inseguridad en que vivimos como sociedad, se expresa inequívocamente un sentimiento de insatisfacción frente al cumplimiento de la  responsabilidad esencial y básico de todo estado y que tiene que ver con garantizar la SEGURIDAD PUBLICA, como actividad elemental para mantener las condiciones materiales que permitan la vida social en todas sus expresiones legales y legítimas.

El aumento de la violencia cotidiana y los delitos en contra de la vida, la libertad y el patrimonio de las personas, sin dudas genera crisis que se vea exacerbadas cuando las diferentes instancias de gobierno muestran su incapacidad  para mantener en sus ámbitos de responsabilidad el orden mínimo que debe prevalecer, cuando existe debilidad de las instituciones de policía y de representación de justicia.

También se expresa esta crisis a través  la creciente desconfianza de la sociedad en la los tribunales de justicia. Las leyes sirven para fijar las reglas de juego en una sociedad, en la medida en la que conozcamos las sanciones por los actos u omisiones ilícitos que se puedan cometer, y que dichas sanciones efectiva e invariablemente se aplican cuando se realiza la conducta ilícita, en esa medida las leyes, se convierten  en código de conducta efectivamente observada.

Si bien es cierto  siempre será bueno contar con buenas leyes y con castigos ejemplares, no menos importante es que los cuerpos de seguridad y orden y los juzgados  apliquen las sanciones que correspondan. Es la única manera de obtener certidumbre y confianza social y jurídica.

Los expertos en seguridad pública han identificado con frecuencia los problemas. Sin menoscabo de la importancia de enfrentar las causas que provocan los delitos, en su combate lo importante es implementar estrategias integrales y no medidas aisladas y mediáticas contra los delitos, la corrupción y la impunidad como sucede con frecuencia;   alcanzar  una  efectiva coordinación y colaboración entre instituciones e instancias de gobierno, lograr el verdadero control y supervisión, así como el superar la falta de voluntad para afrontar la responsabilidad política y gubernamental producto del alejamiento entre las instituciones y la sociedad.

Como siempre, nada se podrá hacer ni tampoco nada podrá tener éxito si las diferentes autoridades no se superponen a sus propios intereses políticos y de partidos, y efectivamente, trabajan para cumplir con sus responsabilidades a favor de la sociedad a la que se deben.