Digno de un análisis es la encuesta viralizada por redes sociales la semana recién pasada en Chañaral, aún cuando, se podría objetar algún mecanismo propio de los profesionales de encuestas y estadísticas, esta particular medición y pulso pre-municipales 2021, que, si bien ha sido interactiva por el segmento la ciudadanía cercana a las formas de participación virtual, deja algunas consideraciones merecedoras de comentar. 

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La suma de los conceptos "no votará" y "no le interesan estas nuevas elecciones "da como resultado un 19,3%, obviamente influenciados, no sin razón, por el desprestigio que en estos últimos tiempos tiene la clase política, sumidos en hechos reñidos con la probidad y corrupción misma, especialmente en los partidos tradicionales. 

Sin perjuicio de lo anterior, se puede apreciar también una lejanía por lo que reconoce como más de lo mismo y la no diferenciación de personas reconocidas e incluso en pleno ejercicio que permiten en esta fraccionada -pero decidora- encuesta, da como resultado un notorio alejamiento de la "simpatía" de la ciudadanía. 

En contraste, la indesmentible información, da cuenta de una búsqueda, consciente o no, de algo o alguien en qué creer, una figura reconocida y nueva en la administración municipal que dé cuenta de nuevas ideas innovadoras, frescura en el actuar y ofrezca la credibilidad tan perdida en estos tiempos tan complicados.