El 30 de abril del presente año la Ilustre Municipal de la Ciudad de Copiapó, licitó la remodelación del único pulmón verde de la comuna, “EL PRETIL” esto implicaba una serie de modificaciones al parque, estacionamientos y la construcción de un restaurante, además de la tala de alrededor de 60 a 75 árboles, inversión que contemplaba una suma de dinero de 6.000 millones de pesos. Los concejales que aprobaron la licitación en plena cuarentena fueron Magaly Milla, Rosa Ahumada, Wilson Chinga, Luis Orrego, Omar Luz, Mario Bordoli y Miguel Carvajal, el voto en contra vino de parte de la Concejala Paloma Fernandez, quien manifesto su oposición al proyecto, argumentando que no había participación ciudadana y que se contaba con escasa información aduciendo que era poco transparente.

Las alarmas se encendieron el pasado viernes 3 de julio, cuando en las redes sociales empezaron a subir distintos videos y fotografías que mostraban como eucaliptus añosos eran talados y botados con maquinaria pesada  en el parque, además de aparecer fotos con  pimientos talados.

Esta situación indignó a los vecinos de El Pretil y alertó a las organizaciones sociales, ambientalistas, culturales y deportivas de la ciudad, quienes se organizaron, realizaron movilizaciones, incluso fueron fuertemente reprimidos por la fuerza pública. Las muestras de malestar Ciudadano por las redes sociales fueron masivas.

El día 6 de julio, el Edil de la Ciudad de Copiapó, fue visitado por los movimientos sociales, ambientales, culturales de la comuna, quienes le llevaron un árbol de regalo, lo conminaron a paralizar la tala como medida inmediata, presión popular  que llevo a que el edil de la ciudad, Marcos Lopez Rivera, diera pie atrás, ordenando que se detuviera la tala, por lo que se lograron talar solo 7 árboles gracias a la presión social ejercida por la gente.  Además, solicitaron la participación ciudadana, debido a que la comunidad no fue incluida, ni escuchada, señalándole al alcalde Lopez que la participación y transparencia había sido unas de sus promesas de campaña y que claramente no la estaba cumpliendo.

Finalmente, el tema deberá resolverse en la Corte de Apelaciones de Copiapó, quien ya paralizó el proyecto de remodelación del pretil y deberá resolver un recurso de protección interpuesto el pasado lunes.

Esta no es la primera vez que la ciudadanía reclama por la tala indiscriminada de árboles en la ciudad de Copiapó, cabe recordar la impresentable tala de 24 pimientos añosos en las cercanías al Mall, situado al lado del rio Copiapó, realizada en aquellos tiempos cuando era alcalde Maglio Cicardini Neyra y Raphael Prohens era el Intendente.

Esto nos lleva a concluir que, en una ciudad carente de espacios públicos de calidad, con muy pocas  áreas verdes disponibles para la ciudadanía, las autoridades no se pueden dar el lujo de prescindir de ellas. Además, a una ciudadanía empoderada y participativa no se le puede negar su incorporación en la toma de decisiones que modifican sustancialmente la ciudad, debiendo las autoridades modificar su  forma de hacer política.