Por Giuliano López, Consejero GORE Atacama.
La lucha por defender el patrimonio ambiental de nuestra región y por impedir que Atacama sea sacrificada con la instalación de Castilla y otras termoeléctricas a carbón, es una causa excepcionalmente difícil, una causa que requiere aunar el máximo de voces y voluntades.
Frente a esta realidad, las municipalidades, instituciones territoriales de privilegiada cercanía con la población, están llamadas a ser actores principales y permanentes de esta gran causa. Los alcaldes y concejales tienen mucho que decir y que hacer, mucho que aportar para impedir el sacrificio ambiental de nuestra región.
Cierto es que hay alcaldes y concejales que han tenido una preocupación permanente y que han hecho declaraciones y aportes significativos a esta causa, pero lo que ha predominado en los últimos meses ha sido el silencio, la ausencia y la inacción municipal.
Debe reconocerse que la palabra de la Asociación Regional de Municipalidades de Atacama, ARMA, ha sido una palabra valiosa y comprometida, una palabra que la Asamblea de esta Asociación realizada el pasado 30 de julio expresó claramente en los siguientes votos políticos:
1.- La Asamblea Regional del ARMA reitera su rechazo a la instalación de la Central Termoeléctrica Castilla, posición esta ya manifestada en la sesión del 7 de abril.
2.- Se acuerda sesionar en la localidad de Totoral, el sábado 7 de agosto, sesión a la que se invitará a todos los parlamentarios de la región.
3.- Se acuerda solicitar una audiencia al Presidente de la República, para conocer su posición frente a la instalación de la Termoeléctrica Castilla y al deterioro mediambiental que sufre y ha sufrido la región
producto de la actividad minero-industrial.
4.- Si finalmente el proyecto Termoeléctrica Castilla es votado favorablemente a los intereses de la empresa por parte de COREMA -o sus sucesora- esta Asociación romperá relaciones con el Gobierno Regional -con la Intendenta-, ya que considera impresentable la acción del SEREMI de Salud, quien ha desconocido la resolución emitida por la anterior SEREMI, la cual declaró contaminante el proyecto.
5.- Esta Asociación, ARMA, se opone a toda forma de actividad contaminante de los suelos, agua, aire, flora y fauna -marítima y terrestre-, y por ello plantea la revisión de los 9 planos reguladores de las comunas de Atacama; así se tendrá el mapa general de la región para identificar y ubicar los problemas de contaminación que nos afectan.
6.- Esta Asociación buscará contar con asesoría legal para realizar las acciones legales frente al proyecto Termoeléctrica Castilla.
Cierto es que el accidente del 5 de agosto en la mina San José vino a complicar la concreción de estos acuerdos ambientales, pero ese accidente no justifica la inacción ni el silencio municipal actual. A Atacama no le sirve un ARMA puramente formal, un ARMA silenciosa y oxidada… Atacama necesita un ARMA eficaz, un ARMA regionalista, un ARMA con el corazón y la mente puesta en la defensa del patrimonio ambiental y el futuro regional. Atacama necesita hoy la realización de los acuerdos ambientales comprometidos por sus municipalidades el año pasado.
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