Inaugurado el 20 de septiembre de 1876, es el primer cementerio con administración laica en nuestro país, declarado como monumento nacional por sepulturas históricas, pero que  actualmente sufre de sobrepoblación y no presenta ningún proyecto de remodelación.

Esa es la realidad que vive actualmente el cementerio de Caldera, y así lo refleja el historiador y cronista, Vidal Naveas al Diario de Atacama, acotando que “me da pena, rabia, ver el cementerio como se encuentra hoy día, como la gente va a buscar a sus deudos y no los encuentra. Gracias a la tecnología se dan cosas como por ejemplo, que personas de apellido Mollet en Inglaterra, quieren venir a ver a Lina Mollet, quien fue directora del Liceo Mercedes Fritis Mackenney, pero no está, uno no la encuentra, no hay datos… Ni de la familia Mackenzie, familia Griffin, tantos personajes de la historia calderina que lamentablemente no están”, comentó afectado Vidal. 

Y prosiguió explicando que, “cuando estaba la administración del alcalde Freddy Campusano, una entidad australiana hizo entrega de unos valores para la restauración del Cementerio de Caldera, como no se podía entregar dinero hizo entrega de un libro que se debía vender y esos recursos hacerlo llegar para la reparación del cementerio, pero lamentablemente eso nunca se vio”.

Actualmente el cementerio no contempla ningún plan de restructuración, pese a que en mercadopúblico.cl aparece un proyecto de licitación.