Una grave acusación de tortura al interior de la cárcel de Copiapó fue dado a conocer por el Diario de Atacama. El medio dialogó con Tatiana Alveras, pareja de un interno, quien señala que fue golpeado por gendarmes, generando una compleja situación de salud que llevó a que fuera tratado en el Hospital Regional.

Según relató, gendarmes lo sorprendieron con un “pito” de marihuana, por lo que obligaron a realizar “200 sentadillas a punta de patadas, combos y palos” el 16 de marzo. Ello le habría generado vómitos de sangre, entre otras consecuencias, siendo internado en la Unidad de Tratamiento Intensivo del recinto de salud, siendo dado de alta el 26 de este mes.

Pero lo grave de la denuncia no queda allí, dado que la mujer indicó que “no podía ir al baño, se quejaba de dolor en su abdomen y costillas, pero los gendarmes no lo pescaban”, agregando que en una vista 4 días después “veo que entre tres reos lo venían subiendo porque no podía caminar y ahí ya procedieron a llevárselo al hospital”.

El caso quedó en manos de la justicia, tras ser presentado un recurso administrativo por parte de la madre del recluso. Desde Gendarmería iniciaron una investigación, cuyos antecedentes los entregarán al Ministerio Público para esclarecer el hecho.