8 claves para detectar a tiempo problemas auditivos en escolares

20 Marzo 2016

El tratamiento temprano de la pérdida auditiva en niños puede permitirles desarrollar todo su potencial académico.

El QueHayDeCierto >
authenticated user Editor

El regreso a clases es una gran oportunidad para estar atentos a ciertos signos que podrían advertir algún grado de pérdida de audición. Muchas veces los problemas auditivos no son diagnosticados a tiempo o se confunden con problemas de aprendizaje. En Chile se estima que cerca de un 32,7% de la población tiene la percepción de presentar al menos un problema de audición.

El ese sentido, la audición tiene directa relación con la capacidad de aprender, ya que de toda la información que recibe nuestro cerebro durante el día, el 75% proviene del oído. Esto lo transforma en la principal vía para adquirir las facultades del lenguaje hablado, proceso trascendental en la formación de una persona.

Para Ximena Pérez, Fonoaudióloga del Centro Audiosalud “la detección temprana de la hipoacusia es fundamental para encontrar la solución adecuada y así asegurar que el niño desarrolle el lenguaje correctamente y se adapte al ritmo de enseñanza con mayor facilidad”.

No tratar a temprana edad alguna complicación auditiva, no solo podría traer como consecuencia un retardo en los procesos cognitivos, sino también podría provocar secuelas psicológicas que afecten el carácter y las relaciones interpersonales.

El rol que cumplen los padres y profesores, es primordial, Ximena explica que “los educadores deben estar atentos al desempeño del niño dentro de la sala de clase y es esencial que sepan reconocer indicios de una posible dificultad para escuchar correctamente”.

Los padres y profesores pueden detectar si un niño tiene dificultades para escuchar cuando:

• No responde cuando se lo llama o se le pide algo

• Tiene problemas para distinguir de dónde viene el sonido

• Requiere que se le repitan las indicaciones frecuentemente

• No cumple órdenes o malinterpreta las instrucciones

• En la producción oral o escrita, modifica frecuentemente alguna letra o palabra

• Al dar una orden, se observa que habitualmente actúa imitando a sus compañeros

• Pregunta ¿qué? con frecuencia

• Nota diferencia en la comprensión de los mensajes en los diferentes entornos (silencioso o ruidoso)

Si la respuesta a alguna de estas preguntas es “sí”, o si se presenta cualquier duda sobre el progreso del desarrollo auditivo o lingüístico del niño, es recomendable consultar a un especialista.

Para detectar la posible pérdida auditiva existen diversos estudios como audiometrías, emisiones otoacústicas, potenciales evocados auditivos y timpanometrías. La realización de estos exámenes dependerá de la edad del paciente.

“La elección del tratamiento dependerá de muchos factores, lo importante es lograr una detección  temprana para que el niño pueda comenzar a estimular al máximo su capacidad auditiva. De esta manera se garantiza una óptima preservación auditiva, la que será clave para lograr los mejores resultados, pues permitirá un impacto directo en el desarrollo cognitivo, en su capacidad de aprendizaje y sobre todo en su calidad de vida”, comentó la especialista.

Afortunadamente existen múltiples soluciones que pueden ayudar a niños con hipoacusia, dependiendo del tipo y grado de la pérdida auditiva: audífonos, implantes cocleares, implantes de estimulación eléctrica acústica, implantes de oído medio e implantes de conducción ósea..

  • El implante coclear es una opción de tratamiento para personas con pérdida auditiva neurosensorial de severa a profunda. El implante coclear consta de dos partes: un procesador de audio externo, situado detrás de la oreja o por encima de ella; y un componente interno, que contiene circuitería electrónica y un haz de electrodos, el cual se coloca debajo de la piel y está fijado al hueso mediante una cirugía. El procesador externo está sujeto por medio de un imán a la parte interna. El procesador de audio capta los sonidos y los transmite al componente interno. El componente interno envía esta información sonora en forma de pulsaciones a los electrodos dentro de la cóclea, que estimulan directamente el nervio auditivo; éste llevará la información al cerebro, donde será percibida como sonido.
  • El implante de estimulación eléctrico acústica combinada está diseñado para atender las necesidades únicas de individuos con sordera parcial. La sordera parcial se define como una pérdida auditiva de moderada a severa en las frecuencias bajas y pérdida auditiva profunda en las frecuencias altas. Este sistema de implante  combina la amplificación acústica con la tecnología de implante coclear (estimulación eléctrica).
  • El implante activo de conducción ósea está indicado para personas con pérdida auditiva conductiva, pérdida auditiva mixta o sordera unilateral. El sistema consta de dos componentes: un implante y un procesador de audio que se puede ocultar discretamente  debajo del pelo. Las señales sonoras, que son registradas por el procesador de audio, se transmiten al implante que las convierte en vibraciones mecánicas y las conduce al hueso. Desde el hueso pasan al oído interno donde son transformadas en señales nerviosas y  transmitidas como impulsos al nervio auditivo.
  • El implante de oído medio se usa para tratar a personas diagnosticadas con una pérdida auditiva neurosensorial de leve a severa o una pérdida auditiva conductiva o mixta. Un implante en el oído medio transforma el sonido en vibraciones mecánicas que se utilizan para estimular directamente las estructuras del oído medio. Estas vibraciones pasan al oído interno desde donde llegan al cerebro para ser percibidas como sonidos.

Detectar una pérdida auditiva lo más pronto posible y encontrar el tratamiento adecuado, es clave para asegurar las mejores posibilidades de desarrollo audio-lingüístico, y con ello, la confianza en sí mismo.