Jóvenes privados de libertad maravillan a copiapinos con exposición artística

Diversos colores, texturas y técnicas artísticas marcaron la segunda exposición de trabajos de jóvenes privados de libertad, que permanecen cumpliendo condena en el Centro de Justicia Juvenil de Copiapó. La novedosa muestra denominada “Coloreando mi Futuro”, se instaló este fin de semana en el patio central del Mall Plaza Copiapó y tuvo como objetivo demostrar a la comunidad que los adolescentes tienen talento de sobra y pueden aprovecharlo para salir adelante. 

Los trabajos ya habían sido mostrados en una exposición montada en el salón José Joaquín Vallejo, en la cuenta pública de la Defensoría Penal Pública hace aproximadamente dos meses, instancia en que los asistentes quedaron impresionados por el nivel y la calidad de las obras confeccionadas por los adolescentes infractores de ley. 

Estas piezas, entre los que se pueden encontrar 10 trabajos de vitrofusión, 5 pinturas y 2 tallados en madera, fueron elaborados por los jóvenes gracias a las herramientas entregadas en los talleres de capacitación que se les imparte al interior del centro, que están apuntados a apoyar sus procesos de reinserción social y laboral. 

“Los jóvenes se motivan mucho, ellos están ávidos de aprender. Es increíble de ver como ellos están sumamente motivados de descubrir otras formas de vivir, distintas al conflicto que los tiene privados de libertad, lo que finalmente los puede hacer triunfar fuera del sistema”, manifestó la directora regional de Sename, Anamaría Aguirre. 

Los talleres no sólo son artísticos. Dentro de las rutinas diarias de los adolescentes están incorporados una serie de capacitaciones de apresto laboral y actividades deportivas, las cuales permiten que también desarrollen sus tareas de escolarización que forman parte de las labores del anexo escuela Medardo Cano que funciona al interior con el propósito de que los jóvenes cumplan con su enseñanza escolar. 

Asimismo el apoyo psicosocial es de vital importancia para los adolescentes, considerando que gran parte de ellos ingresan con un daño psicológico importante y, en algunos casos con consumo problemático de drogas y alcohol, situaciones que también son abordadas y tratadas gracias al programa “Kausana”, perteneciente a Senda, el cual ha logrado una importante cantidad de altas terapéuticas, procesos fundamentales para afrontar la sociedad a la hora de cumplir sus condenas y conseguir la libertad.