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UDA comenzó a dictar taller de Yoga Kundalini los martes y jueves
La Universidad de Atacama ofrece para todos sus alumnos, académicos y funcionarios los martes y jueves en diferentes horarios.
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authenticated userLa instructora María Luisa Villarroel es la encargada del taller de yoga que la Universidad de Atacama ofrece para todos sus alumnos, académicos y funcionarios los martes y jueves en diferentes horarios.
Las clases de Yoga Kundalini se realizan en el Área Norte de la Casa de Estudios, en el Campus Paulino del Barrio, las que comienzan a las 13:15 horas, los días martes y jueves de cada semana. Además, en el Campus Cordillera se dicta la clase de Yoga Kundalini los días martes a las 18:00 horas y los jueves a partir de las 19:00 horas, en el salón auditórium del establecimiento.
La instructora María Luisa Villarroel invitó a toda la comunidad universitaria al taller para vivir la experiencia del yoga, que define como “una experiencia muy enriquecedora, porque uno está en contacto con la juventud, con toda esta energía de expansión creativa que tienen y les entrego herramientas de autocontrol, respiración, concentración a los alumnos, esto significa que estoy colaborando para que ellos sean buenos profesionales y mejores seres humanos. Y en el corto plazo les ayudará bastante a tener mejor concentración, relajación, a estar atentos y enfocados en lo que deben hacer, para utilizar bien el tiempo, sobre todo en las horas de estudio”.
La alumna de Geología Amalia Anguita, estudiante de primer año de la carrera señaló que “varias veces he ido a Yoga pero nunca constantemente, pero ahora que la universidad da este taller voy a venir siempre. Ésta es mi segunda clase. Después de la clase me siento mucho mejor conmigo misma, agiliza y energiza el cuerpo. Encontré súper buena a la profesora, tiene un aire especial, se nota que sabe, transmite energía y me gustó el tono de voz con que hace la clase. Le he dicho a todos mis compañeros que vengan. Me he dado cuenta que sorprendentemente los más interesados en venir han sido los hombres”.
El estudiante Diego Araya, uno de los varones que asiste a yoga puntualizó que, “recomiendo que vengan, porque es muy relajante, pero al final de la clase te activa mucho, es raro. Este taller ayuda a la convivencia entre los alumnos, para conocer más gente, es súper bueno. Y no me da vergüenza venir, porque ahora todo se tolera y ya no hay rollos, a parte que está lleno de mujeres hermosas”.