Ayer, en el Hotel Chagall, los trabajadores que protagonizaron la epopeya de la mina San José se reunieron, junto a sus abogados y a la alcaldesa de Caldera, Brunilda González, para analizar las acciones legales que tomarán contra la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) por la presunta responsabilidad de ésta en el accidente que por milagro no les quitó la vida.
“Ellos, de acuerdo a la ley, tenían la labor de fiscalizar y tomar medidas preventivas en relación a los lugares de trabajo donde desarrollaban el trabajo los mineros", explicó Edgardo Reinoso, uno de los abogados, quien además se manifestó contrariado por la actitud del Gobierno: “Los mineros están preocupados y molestos; el Gobierno les prometió que tendrían un tratamiento médico a lo menos por seis meses y resulta que ya hay 4 trabajadores que fueron desvinculados y dados de alta por la propia Asociación Chilena de Seguridad. Realizaremos la denuncia correspondiente y vamos a ejercer las acciones en tribunales para revertir esta situación".
A pocos meses de acontecido el episodio que dio la vuelta al mundo, parece extraño ver el conflicto en el que siguen envueltos los “33”, considerando que las autoridades les ofrecieron ayuda permanente y sostenida en el tiempo. ¿Sólo fueron palabras de buena crianza? ; ¿de nada sirvió lo ocurrido para mejorar las condiciones laborales en la pequeña y mediana minería del país?
FUENTE: www.diarioatacama.cl
FOTO: Ministerio Secretaría General de Gobierno